Los bueyes, adorados desde tiempos de los antiguos egipcios, son intimidantes, pero también amigables. Normalmente se les ve haciendo trabajos pesados en zonas rurales y de difícil acceso, como en Río San Juan o Chontales, donde el Instituto Nacional de Información de Desarrollo ha llegado a contarlos por cientos, sin embargo, es raro verlos...
Leer más..