Tres hermanos pasteleros imberbes lanzan su empresa en Nueva Segovia
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Un trío de hermanos pasteleros que vive en Ocotal sueña con convertirse en experto del ramo, y tienen tiempo de sobra, porque ninguno supera los ¡10 años de edad!
Son los Cake Brothers. Los pequeños Gabriel, Álvaro y Daniel, de 10, 8 y 6 años de edad, respectivamente, iniciaron su carrera en la pastelería preparando budines y galletas caseras, con la ayuda de su madre, Cecil Lovo.
PASTELEROS SIN DERECHO A HORNO
“Nosotros mirábamos en la televisión un programa llamado Cake Boss y nos encantó, entonces (supimos que) queríamos ser pasteleros, pero nuestra mama se preocupaba que tuviéramos que ocupar el horno, así que tuvimos que usar ingredientes sin (necesidad de) horno, ni licuadora”, relata Gabriel frente una audiencia, durante un evento en el Polideportivo Solidaridad.
La mamá comenta que los niños le “decían que querían hacer pasteles” pero, como toda madre responsable, les explicaba lo peligroso que podía ser para ellos manipular utensilios de cocina y manejar el horno.
Pero eso no cortó la inspiración del trío de hermanos.
Cecil relata que, ante el gran obstáculo los niños encontraron una solución. A los pocos días “se pusieron a buscar en youtube sobre cómo hacer pasteles sin necesidad de horno, y lo encontraron”.
QUISIERON Y PUDIERON
Ante la insistencia de sus hijos y notando que tenían un verdadero interés por la pastelería, la mamá decidió ayudarles.
“Ellos buscan los ingredientes, deciden cuáles van y cuales no y yo les ayudo a elaborar las galletas capa por capa”, comenta Cecil.
Al poco tiempo pensaron que el proyecto debía tener un nombre, los hermanos se reunieron con su madre para escoger el nombre indicado, y en una lluvia de ideas surgió uno en especial ‘Cake Brothers’, “a mi mama le gustó y ese fue el nombre que escogimos”, dice Gabriel.
EL GRAN DESPEGUE
El pasado 2 de diciembre mostraron su talento en una feria organizada por el Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur). Ese fue el inicio oficial de los hermanos pasteleros.
Por su parte, la madre de los Cake Brothers, espera que la empresa crezca, también anhela que en un futuro sus hijos elaboren un libro de recetas de pastelería.
Por eso, la orgullosa madre opina que los padres deben “escuchar los sueños de los niños y ayudarlos para que se hagan realidad”.